En medio de una pandemia, debe mantenerse la importante labor de la lucha contra la polio
Nov. 30, 2020
La pandemia de COVID-19 ha creado problemas de salud que van más allá de la propia enfermedad. En mayo de 2020, la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que, en todo el mundo, 80 millones de niños menores de un año no recibieron las vacunas de rutina para varias enfermedades. La pausa en las vacunaciones, las cuales requieren un estrecho contacto entre los vacunadores, los bebés y sus familias, era necesaria para hacer frente a la pandemia. Pero como Henrietta Fore, directora ejecutiva de Unicef, advierte, “No podemos cambiar un brote mortal por otro”.
Frente a estos desafíos, las contribuciones de Rotary a la erradicación de la polio son más importantes que nunca. En enero de 2020, la Fundación Bill y Melinda Gates y Rotary renovaron su larga relación de colaboración (artículo en inglés) y se comprometieron a captar en los próximos tres años un monto adicional de USD 450 millones los cuales se destinarán a la campaña para la erradicación de la polio. Rotary se ha comprometido a recaudar USD 50 millones al año y la Fundación Gates aportará dos dólares adicionales por cada dólar contribuido por Rotary. "Si bien la respuesta a la pandemia de COVID-19 es una prioridad urgente en el campo de la salud mundial, no podemos permitir que nuestro progreso contra la polio se vea afectado", explica Michael K. McGovern, presidente del Comité Internacional de PolioPlus de Rotary y miembro de la Junta de Supervisión de la Iniciativa Mundial para la Erradicación de la Polio (GPEI). Iniciativa Mundial para la Erradicación de la Polio (GPEI por sus siglas en inglés). "Nuestro reciente éxito en la región africana de la OMS demuestra que es posible lograr un mundo libre de polio, pero para cumplir nuestra promesa de alcanzar un mundo libre de polio, es preciso renovar la atención y el apoyo a las labores en curso en los dos países endémicos restantes".
En Marzo, la GPEI contribuyó a organizar la respuesta mundial a la pandemia de COVID-19, aprovechando para ello la infraestructura ya disponible creada para llevar a cabo las actividades de vacunación y vigilancia epidemiológica contra la polio. Asimismo, dedicó fondos y otros recursos a fin de reanudar las actividades de vacunación contra la polio tan pronto como fue posible hacerlo de manera segura, y para adaptar la infraestructura dedicada a la vacunación y vigilancia a las nuevas necesidades.
La experiencia adquirida en la lucha contra la polio sustenta la respuesta a la pandemia
Cuando surgió la COVID-19, la GPEI aportó sus décadas de experiencia a la respuesta a la pandemia. Sin abandonar las labores críticas del esfuerzo para la erradicación de la polio, los trabajadores contra la polio colaboraron en la localización de contactos, la realización de pruebas y las labores de concientización de las comunidades sobre el lavado de manos y otras formas de reducir la transmisión de la COVID-19 y la exposición a la misma. En muchos casos, ellos realizaron simultáneamente actividades de erradicación de la polio y de respuesta a la COVID-19.
La infraestructura construida con miras a la erradicación de la polio ha demostrado ser sumamente valiosa en la respuesta a la pandemia. Por ejemplo, las líneas telefónicas de emergencia de la GPEI, así como todos los centros de operaciones de emergencia, computadoras y vehículos se pusieron a disposición de la respuesta a la COVID-19. En Nigeria, las oficinas de campo de la OMS, que por lo general se utilizan para coordinar las labores de erradicación de la polio, ahora también alojan a los equipos de la OMS dedicados a la lucha contra la COVID-19. En Pakistán, cientos de funcionarios encargados de la vigilancia epidemiológica contra la polio han recibido capacitación sobre la vigilancia contra la COVID-19. En Afganistán, los voluntarios encargados de concientizar a las comunidades sobre la polio han recibido capacitación para que informen a las comunidades sobre la COVID-19 y demuestren la técnica correcta para el lavado de las manos y otras medidas preventivas.
Las subvenciones PolioPlus continúan financiando labores fundamentales
Las actividades de inmunización contra la polio se reanudaron en julio adoptando las precauciones necesarias para proteger a los trabajadores de primera línea y a las comunidades. Gracias a la financiación proporcionada por sus socios, Rotary otorgó en junio más de USD 50 millones en subvenciones PolioPlus para apoyar las labores de erradicación de la polio en Afganistán y Pakistán (los dos últimos países donde el poliovirus salvaje sigue siendo endémico) y en toda África. En Afganistán, las labores de comunicación y divulgación en la comunidad (denominadas "labores de movilización social") tienen una importancia capital e incluyen la distribución de tres millones de pastillas de jabón para promover la higiene, proteger a la población contra la polio y la COVID-19, e incrementar la receptividad de la población local a las campañas de vacunación. En Pakistán, las labores de movilización social se centraron en concientizar a los líderes religiosos locales ya que ellos pueden promover las vacunas mediante anuncios y sermones en las mezquitas.
En junio, la OMS se comprometió a financiar una Jornada Subnacional de Vacunación en la República Democrática del Congo en el primer trimestre de 2021. Una subvención de Rotary por un monto de USD 3 millones contribuirá a financiar la vacunación de 8,4 millones de niños en dicho país.
La Oficina Regional de la OMS para África continúa su labor de vigilancia epidemiológica contra la polio en 47 países de todo el continente. Una subvención PolioPlus por un monto de USD 4 millones financiará actividades de laboratorio y de vigilancia, como la recolección y el transporte de muestras de heces, así como la capacitación del personal. La subvención también hará posible emprender los cambios de procedimiento exigidos por la COVID-19.
Cuando el 24 de octubre Rotary celebró el Día Mundial contra la Polio, sus socios sabían que, incluso en medio de una pandemia, la importante labor de lucha contra la polio debe continuar. Hoy más que nunca necesitamos el apoyo de los todos los socios de Rotary para ganar la batalla y lograr un mundo libre de esta enfermedad.
En junio, Rotary aprobó subvenciones para: 19,306 vehículos alquilados para trabajadores de primera línea en Afganistán, 90 millones de dosis de la vacuna oral monovalente contra la polio, 12,139 vacunadores entrenados en Sudán, and 2,530 trabajadores comunitarios de la salud contratados en Pakistán.
• Este artículo se publicó originalmente en el número de octubre de la revista Rotary.